domingo, 22 de febrero de 2009

Islas Seychelles (Mahe)

Las islas Seychelles se encuentran en el Océano Indico. Se trata de un archipiélago de aproximadamente 150 islas de las cuales tan sólo unas 30 están habitadas. La isla principal y más grande es Mahe, con su capital Victoria por lo que es en esta isla donde está localizado el aeropuerto internacional. Los vuelos hasta allí son directos desde Londres, París o Roma y la duración estimada es de 8 horas. Hay que recalcar que se trata de un paraíso fiscal y las medidas de inmigración son bastante importantes, es por ello que para entrar en las Seychelles se necesita tener el pasaporte en vigor, billete de regreso a tu país -que te piden y sellan en el propio aeropuerto nada más aterrizar- y un visado por un mes, que se expide también en el aeropuerto y puedes prorrogar por un año. A la hora de volver a casa, los mayores de 12 años han de pagar una tasa aeroportuaria de 40 $ americanos Lo habitual si vas a pasar unos días en las Seychelles es alojarse en la isla de Mahe, ya que es la que más opciones a parte de playa ofrece al turista, pero si lo que estás buscando es un paraíso solitario lo que deberías hacer es ir a las islas de Praslin, la Digue… sobre las cuales hablaré más adelante. Estas islas tras haber sido colonia francesa e inglesa, a día de hoy son independientes, de hecho los idiomas oficiales de la isla son tanto el francés y el inglés junto con el bollu, idioma criollo derivado del francés que tan sólo hablan los nativos. Las Seychelles es el país más pequeño del mundo que emite su propia moneda que es la Rupia de Seychelles, pero al no cotizar en los bancos nacionales tendrás que cambiar la divisa una vez llegues a las islas (no obstante, tanto en los hoteles como en los restaurantes admiten € y $). El clima de estas islas es tropical y sus estaciones se definen por el comienzo y final de los vientos del sureste, que normalmente soplan de mayo a octubre. El resto del año, reciben la visita de los monzones y por tanto sus lluvias, especialmente en el mes de enero que es el más húmedo de todos, las islas de Mahé y Silhouette son las que más agua reciben. Los meses de julio y agosto son los más secos. La temperatura durante todo el año oscila entre los 24° y los 31°C, y la humedad gira entorno al 80%. Mahe como ya se ha comentado es la isla principal, mide 27 kms de largo por 12 kms de ancho aproximadamente. La mayoría de la actividad de la isla se centra en la parte norte, que es donde están los mejores hoteles e incluso el aeropuerto, Recomiendo el hotel Hilton Northolme por su ubicación dentro de la isla. La forma más fácil de recorrerla es en coche, en un día la habrás recorrido entera, eso sí, al haber sido colonia inglesa han heredado el conducir por el lado izquierdo por lo que hay que tener especial cuidado si no estás acostumbrado. El límite de velocidad en las zonas urbanas es de 40 km/h y en carretera, de 65 km/h. Para alquilar el coche lo más cómodo es reservarlo en tu propio hotel, donde te ofrecerán una gran variedad de modelos desde un coche normal de 5 plazas hasta monovolúmenes, en caso de necesitarlo. El precio por día de un coche de 5 plazas es de aproximadamente 30 €. En el centro de la isla encontramos el Parque Nacional de Morne Seychellois con frondosos bosques y plantaciones de canela y té que impregnan el ambiente. Aquí se encuentra su punto más alto Morne Seychellois con 905 m. Acceder a esta zona con el coche no es difícil ya que con el mapa que te entregan en el hotel verás que no hay pérdida (no hay muchas carreteras) lo único que la subida hay que hacerla con mucho cuidado, la carretera es muy estrecha y no tiene quitamiedos, a lo que si le sumas el hecho de conducir por el lado izquierdo y siempre al borde de un precipicio, hace que el mejor aliado sea un buen copiloto. En la parte sur y oeste se encuentran el Parque Nacional Baie Ternay y el Parque Nacional Port Launay Marine. La capital Victoria es de dimensiones muy reducidas, para hacerte una idea de lo reducido que es tan sólo cuenta con un semáforo. Se trata de una ciudad de estilo colonial con típicas mansiones de madera y variedad de templos católicos, musulmanes e hindúes. En la calle principal la mayor atracción es una réplica idéntica del Big Ben, el famoso reloj de Londres, pero de tamaño mucho más reducido, también en Victoria podrás visitar el Jardín Botánico con las especies más representativas de la flora y la fauna endémica, entre las que destaca la colonia de tortugas terrestres gigantes y una especie de murciélagos denominada fruits bats pues se alimentan de fruta, polen y néctar y del Coco de Mar que la semilla más grande del mundo y uno de los símbolos de las Seychelles, el Museo Nacional de Historia, el Museo de Historia Natural, la Bibliteca Nacional y el Mercado Sir Selwyn-Clarke, donde podrás encontrar los productos alimenticios típicos de la isla y artesanía sin olvidarnos de los souvenirs para llevar a casa Al este de la ciudad de Victoria encontramos la zona de New Port donde se encuentra el puerto, como su propio nombre indica, aquí encontrarás numerosos Yates y el muelle de los ferries que comunican las distintas islas. En los alrededores de New Port está el monumento Zonm Lib, que representa la liberación del colonialismo y muy cerca una escultura de gran tamaño denominada The Three Wings que representa a los continentes Europeo, Africano y Asiático. Respecto a las playas de Mahe podemos destacar por encima de todas la de Beau Vallon al Noroeste de la isla, con tres kilómetros de longitud y con forma de media luna, es perfecta para practicar windsurf por su gran oleaje. Para hacer snorkeling destaco la de Anse à la Mouche, al oeste de la isla y bastante más tranquila que la anterior. Baie Lazare en el suroeste de la isla es otra buena opción, se trata de una playa sombreada gracias a los árboles que la rodean y junto a un pueblo de pescadores. Punta Noroeste las playas destacan por su paisaje singular gracias a las rocas de granito y vegetación igual que les pasa a las playas de Anse Intendance y Police Bay (al sur de la isla).

Islas Seychelles

La isla de La Digue, a 40 kilómetros al noreste de Mahe, es la famosa isla de las rocas graníticas de color rosa, un lugar que no debes perderte si has decidido ir a las Seychelles. Para acceder a esta isla lo más cómodo es hacerlo en avioneta hasta Praslin y una vez allí en catamarán hasta La Digue. La mejor vista la tendrás al acercarte a la isla y ver la famosa playa de Anse Source d'Argent con sus enormes rocas que la convierten en un sitio surrealista. Para recorrer la isla, que es muy pequeña (10 km²), hay una especie de carros tirados por bueyes. Otra de las opciones es alquilar una bicicleta y así poder visitar los encantos que esta isla ofrece a parte de sus playas. Existe una zona llamada l’Union un bosque repleto de gallinas y tortugas gigantes, además de plantas e insectos autóctonos.
Praslin es la segunda isla más grande de las Seychelles aunque no deja de ser pequeña, 10 kms de ancho por 3 kms de largo. Aquí viven 3 de los tres pájaros más extraños del mundo: el pichón de la fruta, el bulbul y el papagayo negro. También en esta isla encontramos el Valle del Mai, una especie de sendero considerado Patrimonio de la Humanidad donde crece el famoso Coco de Mar de las Seychelles.
Si lo que pretendes es practicar submarinismo mi recomendación es que lo hagas en la isla coralina de Desroches, ya que la fauna marina que rodea la isla la mejor que encontraremos en todo el archipiélago.
Para quienes quieran ver la naturaleza en su estado puro lo mejor es visitar las isla de Fregate, se trata de una isla muy pequeña con 2 kilómetros de largo por 0’5 de ancho, aquí destaca la gran variedad de aves exóticas que sólo habitan en esta zona del mundo, como el Magpic-Robin o el tordo urraca. Si te das un baño en estas aguas es más que probable que lo hagas en compañía de delfines.
Bird Island está localizada a 96 kilómetros al norte de Mahé aproximadamente 30 minutos de avioneta, aquí el visitante ve y siente la naturaleza en estado puro, te sentirás como si fueras el propietario de la isla, ya que sólo se admiten 50 turistas cada vez. Los guías te darán instrucciones para moverte sin peligro y te entregarán una linterna para orientarte por las noches, ya que no hay luz eléctrica. Esta isla es famosa por el millón y medio de aves que la habitan, como los sootysterns. Pero lo principal de esta isla son las tortugas gigantes, en particular Esmeralda –la tortuga más vieja y grande del mundo, según el Guinness– desde hace 200 años.
En definitiva, las Seychelles no defraudarán a quienes las visiten en busca de playas, flora y fauna únicos. Un paraíso africano digno de ser visitado.

lunes, 16 de febrero de 2009

Sydney

Casi en las antípodas nos encontramos con Sydney, la ciudad más antigua y grande de Australia y junto a Melbourne y Camberra una de las más importantes. Sydney es la ciudad más poblada de Australia con casi 4 millones de habitantes.
Se trata de una ciudad muy cosmopolita. Su skyline nos puede recordar en cierta manera a Nueva York, eso sí, en pequeño, gracias a su gran número de rascacielos. Sus habitantes son muy agradables y hacen sentir al turista como uno más de ellos.
Hay que tener en cuenta que nuestro verano es su invierno, por lo tanto si decidís ir en la época estival española no olvidéis incluir en la maleta ropa de abrigo, la temperatura no suele bajar de los 8 grados pero es lo suficiente para que si no llevamos algo de manga larga pasemos frío.
La manera más sencilla y cómoda de recorrer el centro de Sydney es a pie, ya que el centro turístico no es muy grande y así no se nos pasará nada por alto.
Mi recomendación es alojarse en la zona colindante a Darling Harbor, se trata de un puerto que a día de hoy se ha convertido en un sitio muy popular, con restaurantes, bares y tiendas. Aquí mismo también encontramos en Museo Marítimo Nacional y el Acuario de Sydney que es la principal atracción de Australia y uno de los más importantes del mundo, debido a la gran variedad de especies marinas que podemos encontrar, en su mayoría traídos de la Gran Barrera de Coral pero también del resto de los océanos. El precio aproximado de la entrada es de 27 Aus$ (14 €). Si quieres disfrutar de una langosta a la plancha por un precio bastante asequible, no dejes de ir al Restaurante Nick’s, en el mismo Darling Harbor.
Un sitio que no debes perderte es la Torre de Sydney, se trata de un edificio de 305 metros de altura desde que el podrás llavarte una visión panorámica de esta ciudad.
El barrio de The Rocks es el más popular y antiguo de Sydney en el que encontrarás edificios históricos, pubs, galerías de arte, restaurantes y tiendas turísticas todo ello junto al puerto principal y con las mejores vistas del mítico edificio de la Ópera. En The Rocks encontramos el Museo de Arte Contemporáneo con una colección de arte australiano e internacional. Este barrio podría considerarse como “el más europeo” de la ciudad. Si te gusta comer carne recomiendo el restaurante Phillip’s Foote (http://www.phillipsfoote.com.au/), en este restaurante eliges la pieza que quieres al peso, te la cortan y acto seguido eres tú quien te la cocinas en unas barbacoas enormes que tienen en un jardín.
Otro punto a destacar es el Puente del Puerto de Sydney, construido en 1932, en su día con sus 500 metros de longitud fue el puente más largo del mundo de un sólo arco. Actualmente puedes subir a él acompañado de un guía y recorrerlo a pie, eso sí, siempre sujeto por un arnés.
Todas las grandes ciudades tienen un parque y Sydney no iba a ser menos, se trata de Hyde Park un parque bastante grande que encontramos en el centro de la ciudad y que es muy popular entre los trabajadores a la hora de la comida.
Como todo el mundo sabe el edificio más famoso de Sydney es la Ópera (Sydney Opera House), este edificio fue construido en 1973, y se trata de una de las obras más famosas de la arquitectura contemporánea. Su estructura asemeja la forma de las velas de un barco y está hecho a base de azulejos que en contra de lo que creemos y parece a simple vista, no son blancos sino de color crema. Este edificio como su propio nombre indica tiene una sala grande para ópera, otra para conciertos, y otras salas más pequeñas. Se trata de un emblema de la ciudad, es el edificio más fotografiado de Australia y uno de los más fotografiados del mundo. Por unos 130 Aus$ (65€) puedes disfrutar de un espectáculo en la sala de la ópera. Para comprar las entradas recomiendo hacerlo con antelación, para no correr el riesgo quedarte sin ellas los días que vas a estar allí. En la página web http://www.sydneyoperahouse.com/whatson/index.aspx puedes adquirirlas sin ningún problema, ya que se trata de su web oficial. Como en todos los teatros en el descanso podrás tomar una copa de champagne con las espectaculares vistas del puerto que ofrece este edificio, eso sí, al módico precio de 10 € la copa.
Si quieres ver la ciudad desde el mar no dudes en acercarte al Puerto y coger un ferry, por aproximadamente 12 Aus$ (6 €) podrás recorre la costa y tener una panorámica de la misma desde otro punto de vista. Hay muchos recorridos y horarios por lo que no tendrás ningún problema en coger cualquier ferry nada más llegar al puerto.
No podemos olvidar que Sydney es una ciudad costera y como tal tiene más de 50 playas entre las que destacan las de Bondi y Manly. A estas playas, que se encuentras a unos 10 Km de Sydney, se puede acceder muy fácilmente utilizando el ferry. Son playas muy visitadas tanto por los turistas como por los habitantes de la ciudad y en sus alrededores encontrarás un gran ambiente surfero así como parques, barbacoas, mercados, restaurantes y tiendas. En contra de los que pueda parecer se trata de playas aisladas y tranquilas y son ideales para practicar el submarinismo por la variedad de especies marinas que habitan en sus aguas y entre los meses de mayo a agosto si tienes suerte podrás encontrarte con grandes ballenas.
Al sur de la ciudad está Chinatown. La población china ha vivido en este lugar desde el siglo XVIII. A día de hoy ya no se trata de un centro residencial, ya que sus habitantes se han trasladado a otras zonas de Sydney como Chatswood, Strathfield y Hurstville, sino más bien de un sitio cultural y comercial, en el que encontraremos las empresas con más renombre del continente asiático. En el Chinatown los fines de semana colocan un gran mercado llamado Paddy’s Market en el que podrás encontrar de todo, gafas de sol, ropa, fruta, flores… En los exteriores de Sydney encontramos otro barrio muy famoso, se trata de Paddington aproximadamente a 3 kilómetros al este. Este barrio destaca por sus casas victorianas y por el mercado que encontrarás los sábados en Oxford Street, en el que se comercializan productos nuevos y usados, artesanías y comidas exóticas. En esta misma calle encontrarás muchas tiendas de moda y galerías de arte.
Si tienes un día libre en Sydney deberías acercarte a las Montañas Azules (Blue Mountains) se trata de un Parque Nacional localizado a 80 kms de la ciudad y que ha sido catalogado como Patrimonio de la Humanidad. Su nombre es debido a la gran cantidad de árboles eucalyptus que hay en la zona, que al desprender su aceite en al aire producen una bruma azulada. Aquí encontramos el Katoomba Scenic Railway, que según el Libro Guinness de los Records, es el tren más empinado del mundo. Los vagones descienden 415 metros a través de un túnel de excavado en la roca, con aproximadamente 52º de inclinación. Originalmente se utilizó por los mineros como forma de acceso a la Mina de Katoomba construida entre 1878 y 1900. Destaca también en este parque la formación rocosa de Tres Hermanas, se trata de tres salientes en la roca en el borde del acantilado.
Sydney es una ciudad muy bonita para visitar, eso sí con 4 ó 5 días tendrás suficiente.